Los profesionales anestesiólogos han liderado consistentemente la seguridad de los pacientes y llevan mucho tiempo reconociendo la importancia de la higiene de las manos en su lugar de trabajo1. La contaminación de las manos está asociada a la transmisión de patógenos mediante múltiples reservorios del espacio de trabajo de los anestesiólogos y el examen del genoma de las bacterias cultivadas de las manos de los proveedores y de los patógenos causantes de infecciones ha confirmado que los proveedores transmiten patógenos que dan lugar a infecciones en los pacientes2,3,4. La transmisión de Staphylococcus aureus (S. aureus) entre los reservorios del lugar de trabajo de anestesia se asocia a un mayor riesgo de infección de heridas quirúrgicas (SSI)5. De hecho, el riesgo de SSI se multiplica por más de cinco cuando los patógenos son sensibles al antibiótico profiláctico empleado y por nueve cuando los patógenos son resistentes al antibiótico profiláctico empleado6. Para reducir este riesgo, se recomienda adoptar un enfoque polifacético para prevenir las SSI7. Cuando la mejora de la higiene de las manos se incorpora como parte de un programa polifacético, pueden conseguirse reducciones importantes de la transmisión de S. aureus y de las SSI8,9. Estos hallazgos deberían impulsar mejoras generalizadas en el cumplimiento de la higiene de las manos de todo el personal intraoperatorio, principalmente entre los profesionales anestesiólogos.
El espacio de trabajo de anestesia es un entorno complejo que incluye al paciente, la cama/mesa quirúrgica, la máquina de anestesia, el poste o postes intravenosos (IV) con dispositivos de infusión conectados, un carrito con suministros limpios y medicamentos almacenados en el carrito o en una estación de medicamentos separada. Los profesionales anestesiólogos interactúan con el paciente y con diversos componentes del espacio de trabajo de anestesia durante la práctica rutinaria de la anestesia10,11. Dada la complejidad de este entorno, la descontaminación de las manos es necesaria para interrumpir los eventos de transmisión y reducir la propagación de infecciones. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define los eventos después de los que debe hacerse la higiene de manos como los “Cinco momentos para la higiene de manos”12. Estos momentos para la higiene de las manos son los siguientes: antes de tocar a un paciente, antes de hacer un procedimiento limpio/aséptico, después de tocar a un paciente, después de una tarea con riesgo de exposición a fluidos corporales y después del contacto con el entorno del paciente (figura 1)12. El cumplimiento de las recomendaciones de la OMS y similares exigiría que el profesional de la anestesia se lavara las manos entre 54 veces por hora13 y 150 veces por hora11,13. Sin embargo, los estudios revelan que los profesionales de la anestesia se lavan las manos menos de una vez por hora14. Claramente, hay grandes posibilidades de mejora. Podría parecer que luchar contra la transmisión de patógenos es imposible, dada la ubicuidad de las bacterias en nuestro entorno. Sin embargo, las investigaciones sugieren que reducir los niveles de S. aureus en las manos de los proveedores a menos de 100 unidades formadoras de colonias (CFU) es un objetivo alcanzable que puede ayudar a proteger a nuestros pacientes9,15.
El Grupo de defensa de las prioridades de seguridad del paciente de la APSF: Desde el departamento de Enfermedades Infecciosas se recomienda que los profesionales de la anestesia se higienicen las manos al menos unas ocho veces por hora durante la atención anestésica16. El lavado de manos o el uso de desinfectante de manos con una frecuencia de ocho veces por hora redujo de forma óptima la contaminación ambiental y de la llave de paso y el posterior desarrollo de infecciones14. Sin embargo, no está clara cuál es la metodología adecuada para incitar al cumplimiento de la higiene de las manos con esta frecuencia16. Entre las investigaciones futuras importantes figuran los productos (por ejemplo, a base de alcohol o de agua y jabón), el lugar de los dispensadores, la técnica de limpieza y los riesgos potenciales.
Aunque las manos pueden descontaminarse eficazmente con soluciones a base de alcohol, las manos visiblemente contaminadas o en potencial contacto con organismos formadores de esporas deben descontaminarse con agua y jabón14,17. Dado que los lavamanos deben estar fuera del quirófano, el alcohol es la opción principal de higiene de las manos para los profesionales de la anestesia y, puesto que provoca menos irritación cutánea que el agua y el jabón, puede reducir el riesgo de piel irritada y de concentraciones bacterianas más elevadas en la piel irritada18,19.
El lugar donde están los dispensadores debe determinarse en función de la densidad de tareas, es decir, el número de tareas que deben hacerse en un período de tiempo. Las organizaciones médicas de prevención de infecciones recomiendan colocar los dispensadores en lugares de fácil acceso dentro del área de atención al paciente20. El uso de dispensadores situados fuera del área de trabajo de anestesia (por ejemplo, en la pared o cerca de la entrada al quirófano) puede interrumpir la atención al paciente. La importancia de la densidad de tareas está bien definida. En un estudio, el uso de un dispensador de alcohol personal y portátil por los profesionales de la anestesia multiplicó por 37 el cumplimiento de la higiene de las manos y, a su vez, redujo la incidencia de la contaminación ambiental y de las llaves de paso, así como las infecciones asociadas a la atención médica14. Otros investigadores evaluaron la colocación del dispensador en el poste intravenoso, a la izquierda del proveedor, como parte de un programa multifacético8,9. La colocación del dispensador en este lugar redujo la incidencia de transmisión bacteriana y el posterior desarrollo de SSI8,9.
Dado que la contaminación de las manos del proveedor está asociada a la contaminación ambiental, la mejora de la frecuencia y la calidad de la limpieza del entorno también puede contribuir a potenciar los esfuerzos de mejora de la higiene de las manos. En un estudio, la separación del espacio de trabajo de anestesia en zonas “limpias” y “sucias” mostró una reducción de la proporción de sitios que alcanzaban un número de CFU superior o igual a 10014,21. Se puede intuir que los dispensadores de alcohol deben colocarse en zonas designadas como limpias. Por ejemplo, el dispensador puede fijarse a la máquina de anestesia o al carrito de suministros con un soporte de montaje o en el poste intravenoso. Si se fija al poste intravenoso, se debe tener cuidado de proteger de salpicaduras y goteos al paciente, el campo quirúrgico y los enchufes eléctricos situados debajo (tabla 1).
Tabla 1: Consideraciones potenciales para el lugar de los desinfectantes de manos en el espacio de trabajo de anestesia.
Aunque los profesionales de la anestesia deben tener fácil acceso a un desinfectante de manos, existen peligros potenciales que hay que tener en cuenta. Todos los desinfectantes a base de alcohol contienen entre un 60 %–80 % de alcohol etílico o isopropílico y agua. Esto se debe a que es necesario un componente de agua suficiente para hidrolizar las membranas de los microorganismos y ralentizar la evaporación del producto22,23. Dado que los productos con alcohol son inflamables, los códigos de incendios regulan el volumen total de desinfectantes permitidos en una sala de procedimientos y la distancia mínima de separación entre los dispensadores de alcohol. Los dispensadores deben estar separados por una distancia mínima de 4 pies y no deben haber más de 1.2 litros en una habitación24. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades también adoptan estas recomendaciones de seguridad contra incendios25. El contenido de los dispensadores de alcohol personales que se llevan en el cuerpo y de las bombas de alcohol de una mano que se colocan en un poste intravenoso debe ser inferior a 3 onzas8,9,14. Aunque no se han reportado incendios relacionados con los desinfectantes de manos, es un riesgo que hay que tener en cuenta.
En resumen, la mejora de la higiene de las manos de los profesionales de la anestesia es un elemento esencial de un enfoque multifacético para reducir la transmisión bacteriana y el desarrollo de infecciones. Se recomienda higienizarse las manos ocho veces por hora durante la atención rutinaria de anestesia. Los desinfectantes a base de alcohol en el espacio de trabajo de anestesia deben colocarse en lugares limpios y de fácil acceso que el médico pueda visualizar claramente.
Jonathan E. Charnin, MD, FASA, Mayo Clinic, profesor auxiliar de Anestesia, Departamento de Anestesiología y Medicina Perioperatoria, Rochester, MN.
Brendan T. Wanta, MD, Mayo Clinic, profesor auxiliar de Anestesia, Departamento de Anestesiología y Medicina Perioperatoria, Rochester, MN.
Richard A. Beers, MD, profesor emérito de SUNY Upstate Medical University, Siracusa, NY.
Jonathan M. Tan, MD, MPH, MBI, FASA, profesor auxiliar de Anestesiología y Ciencias Espaciales, vicepresidente de examen y eficacia clínica, Departamento de Anestesiología y Medicina de Cuidados Críticos, Hospital Infantil de Los Ángeles y Universidad del Sur de California, Los Ángeles, CA.
Michelle Beam, DO, MBA, FASA, FACHE, anestesióloga, Penn Medicine West Chester, West Chester, PA.
Sara McMannus, RN, BSN, MBA, asesora clínica en Sepsis Alliance.
Desiree Chappell, MSNA, CRNA, vicepresidente de Calidad Clínica en NorthStar Anesthesia, Irving, TX.
Randy W. Loftus, MD, Mayo Clinic, profesor asociado de Anestesia, Departamento de Anestesiología y Medicina Perioperatoria, Rochester, MN.
Jonathan Tan recibe subvenciones para investigación de la Fundación para la Seguridad del Paciente de Anestesia, la Fundación para la Educación e Investigación en Anestesia (FAER) y del Centro de Ciencias de la Salud Medioambiental del Sur de California. Es consultor de GE Healthcare y Edwards LifeSciences.
Desiree Chappell está en la Oficina de Oradores (Speakers Bureau) de Medtronic y Edwards Life Sciences y en la Junta Asesora de ProVation.
Randy Loftus informa de la financiación actual de la investigación de NIH R01 AI155752-01A1 “BASIC trial: Improving implementation of evidence-based approaches and surveillance to prevent bacterial transmission and infection” y ha recibido financiamiento de la Fundación para la Seguridad del Paciente de Anestesia, Sage Medical Inc., BBraun, Dräger, Surfacide y Kenall; tiene una o más patentes pendientes; es un socio de RDB Bioinformatics, LLC, una empresa propietaria de OR PathTrac, y ha hablado en reuniones educativas patrocinadas por Kenall y BBraun.
Los demás autores no tienen ningún conflicto de interés.
REFERENCIAS
- Warner MA, Warner ME. The evolution of the anesthesia patient safety movement in America: lessons learned and considerations to promote further improvement in patient safety. Anesthesiology. 2021;135:963–974. PMID: 34666350
- Dexter F, Loftus RW. Estimation of the contribution to intraoperative pathogen transmission from bacterial contamination of patient nose, patient groin and axilla, anesthesia practitioners’ hands, anesthesia machine, and intravenous lumen. J Clin Anesth. 2024;92:111303. Epub 2023 Oct 22. PMID: 37875062.
- Loftus RW, Brindeiro CT, Loftus CP, et al. Characterizing the molecular epidemiology of anaesthesia work area transmission of Staphylococcus aureus sequence type 5. J Hosp Infect. 2024;143:186–194. Epub 2023 Jul 13. PMID: 37451409.
- Loftus RW, Brown JR, Koff MD, et al. Multiple reservoirs contribute to intraoperative bacterial transmission. Anesth Analg. 2012;114:1236–1248. Epub 2012 Mar 30. PMID: 22467892.
- Hopf, Harriet W. MD. Bacterial reservoirs in the operating room. Anesthesia & Analgesia. 2015;120:p 700–702. PMID: 25790198
- Loftus RW, Dexter F, Brown JR. Transmission of Staphylococcus aureus in the anaesthesia work area has greater risk of association with development of surgical site infection when resistant to the prophylactic antibiotic administered for surgery. J Hosp Infect. 2023;134:121–128. doi: 10.1016/j.jhin.2023.01.007. Epub 2023 Jan 21. PMID: 36693592.
- Dexter F, Brown JR, Wall RT, Loftus RW. The efficacy of multifaceted versus single anesthesia work area infection control measures and the importance of surgical site infection follow-up duration. J Clin Anesth. 2023;85:111043. Epub 2022 Dec 23. PMID: 36566648.
- Loftus RW, Dexter F, Goodheart MJ, et al. The effect of improving basic preventive measures in the perioperative arena on Staphylococcus aureus transmission and surgical site infections: a randomized clinical trial. JAMA Netw Open. 2020;3: e201934. PMID: 32219407
- Wall RT, Datta S, Dexter F, et al. Effectiveness and feasibility of an evidence-based intraoperative infection control program targeting improved basic measures: a post-implementation prospective case-cohort study. J Clin Anesth. 2022; 77:110632. Epub 2021 Dec 17. PMID: 34929497.
- Sharma A, Fernandez PG, Rowlands JP, et al. Perioperative infection transmission: the role of the anesthesia provider in infection control and healthcare-associated infections. Curr Anesthesiol Rep. 2020;10:233–241. Epub 2020 Jul 17. PMID: 32837343
- Rowlands J, Yeager MP, Beach M, et al. Video observation to map hand contact and bacterial transmission in operating rooms. Am J Infect Control. 2014;42:698–701. PMID: 24969122
- WHO guidelines on hand hygiene in health care: first global patient safety challenge clean care is safer care. Geneva: World Health Organization; 2009. 21, The WHO Multimodal Hand Hygiene Improvement Strategy. Available from: https://www.who.int/publications/i/item/9789241597906. Accessed July 5, 2024
- Biddle C, Shah J. Quantification of anesthesia providers’ hand hygiene in a busy metropolitan operating room: what would Semmelweis think? Am J Infect Control. 2012;40:756–759. Epub 2012 Feb 9. PMID: 22325482.
- Koff MD, Loftus RW, Burchman CC, et al. Reduction in intraoperative bacterial contamination of peripheral intravenous tubing through the use of a novel device. Anesthesiology. 2009;110:978–985. PMID: 19352154.
- Dexter F, Walker KM, Brindeiro CT, et al. A threshold of 100 or more colony-forming units on the anesthesia machine predicts bacterial pathogen detection: a retrospective laboratory-based analysis. Can J Anaesth. 2024;71:600–610. English. Epub 2024 Feb 27. PMID: 38413516.
- Charnin JE, Hollidge M, Bartz R, et al. A best practice for anesthesia work area infection control measures: what are you waiting for? APSF Newsletter. 2022;37:103-106. https://www.apsf.org/article/a-best-practice-for-anesthesia-
work-area-infection-control-measures-what-are-you-waiting-for/ Accessed August 9, 2024. - WHO guidelines on hand hygiene in health care: first global patient safety challenge clean care is safer care. Appendix 2. Guide to appropriate hand hygiene in connection with Clostridium difficile spread. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK144042/. Accessed May 29, 2024.
- Pedersen LK, Held E, Johansen JD, Agner T. Short-term effects of alcohol-based disinfectant and detergent on skin irritation. Contact Dermatitis. 2005;52:82–87. PMID: 15725285
- Larson EL, Hughes CA, Pyrek JD, et al. Changes in bacterial flora associated with skin damage on hands of health care personnel. Am J Infect Control. 1998;26:513–521. PMID: 9795681
- Glowicz JB, Landon E, Sickbert-Bennett EE, et al SHEA/IDSA/APIC practice recommendation: strategies to prevent healthcare-associated infections through hand hygiene: 2022 update. Infect Control Hosp Epidemiol. 2023;44:355–376. PMID: 36751708
- Clark C, Taenzer A, Charette K, Whitty M. Decreasing contamination of the anesthesia environment. Am J Infect Control. 2014 Nov;42(11):1223-5. Epub 2014 Oct 30. PMID: 25444268.
- Ali Y, Dolan MJ, Fendler EJ, Larson EL. Alcohols. In: Block SS, ed. Disinfection, sterilization, and preservation. Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins, 2001:229–254.
- Rutala WA, Weber DJ, and the Healthcare Infection Control Practices Advisory Committee. Guideline for disinfection and sterilization in healthcare facilities, 2008. https://stacks.cdc.gov/view/cdc/47378 Accessed August 9, 2024.
- National Fire Protection Association (NFPA). NFPA 101 Life Safety Code. 2018 edition. Quincy, MA: National Fire Protection Association; 2018. https://www.nfpa.org/codes-and-standards/all-codes-and-standards/list-of-codes-
and-standards/detail?code=101 Accessed August 9, 2024. - Centers for Disease Control and Prevention (CDC). Clinical safety: hand hygiene for healthcare workers – fire safety and Alcohol-Based Hand Sanitizer (ABHS). https://www.cdc.gov/clean-hands/hcp/clinical-safety/?CDC_AAref_Val=https://www.cdc.gov/handhygiene/firesafety/index.htm Accessed July 5, 2024.